Justicia… poética

Hay un conocido abogado, orondo, engominado. Suele defender en sus juicios los intereses de empresarios y otros probos ciudadanos. Escoge casos mediáticos, casos con víctimas blanco de lágrimas fáciles de sobremesa. Su vocabulario revela con total transparencia su pensamiento. Ya sabemos todos qué pensamiento es.

El caso es que este conocido abogado, engominado, orondo, disfruta lanzando en su alegato final encendidas soflamas contra el terrorismo. Se lanza y sobrevuelan la sala como balas categóricas afirmaciones. Y acostumbra a acabar su discurso con lo que cree el golpe de gracia, el lema de su particular cruzada contra el mal: Read More

Poet Voice

Gracias a este blog descubrí los post-its de Doug Savage y sus Savage Chickens. El otro día me encontré con esta tira y, bueno, me hizo gracia. ¿Hay una voz de poeta? Creo que sí y, además, el gusano acierta bastante al describirla como una mezcla entre “el capitán Kirk y Shakespeare”. Es como si para el poeta fuera inevitable ponerse “estupendo”, algo así como: para hablar de estas cosas tan profundas que os voy a rebelar, es necesaria esta, y solo esta, voz solemne.

Recuerdo que, hace años, oí a Rafael Alberti recitar uno de sus poemas. Para ser sincero, no me gustó nada. Tal vez sea un total inculto y no sea capaz de apreciar lo que lo hacía –no sé–, pero a mi me sonaba afectado, ampuloso, exagerado: una perfecta voz de poeta era aquella.

Luego ya no, luego ya oí a poetas que recitaban de maravilla –o, más bien, de una manera que a mi me gusta–, más natural, menos estelar.

Limpieza

Qué difícil querer todos los días.

Por ejemplo, cuando llegas

con manchas en el saludo

amor se llama el juego

y el pensamiento arqueado.

Hace demasiados meses

que mis payasadas no provocan

y que habría que tirar este casette

no cabe ni un beso en el salón.

Cuando viajas en patinete a Senegal

y cada vez más tú

o te siembras en campos ya regados.

Por ejemplo, aquellos que me cubro

y cada vez más yo

colisionan los planetas en mi estela.

Qué difícil querer todos los días

aunque te busque en las mujeres que me encuentro

sin rastro de nosotros.

Mayo es el mes de acoger a los piratas

A mí me gusta tener huéspedes. Por eso, siempre que puedo, en mi casa de verdad tiro colchones por los suelos e invito a quien quiera a quedarse a dormir.

Y en mi casa-blog, casa del gato, invito a los piratas a pasar. 

¿Que qué quiere decir esto? Pues que tengo invitados.  Que durante el mes de mayo tendréis que estar atentos, porque aquí no solo va a escribir el gato. También van a escribir los huéspedes del gato, que son muchos y llegan todos a la vez, como suele pasar. E irán dejando aquí sus huellas como quieran.

Pero claro, la menda también andará abordando otros salones. Aquí la cesión de llaves se hace por intercambio. Si quieren encontrar sus palabras, tendrán que pasarse cotidianamente por Genocation, por Los Ritos de Paso, por vi230850, por Mundo Iconoclasta, por Este Jardín, por El Cuaderno de Tigrida, por Batman es Indio, por Notas de Papel, por Contemporáneos. En cualquier sitio de esos podrán estar palabras que no estarán aquí, mezcladas con las del dueño de la casa o con las de cualquiera de los piratas. Igual que las de todos ellos vendrán a tomar a su antojo este tejado.

Ya veréis, nos vamos a divertir. Como siempre que hay visitas. Read More