Aproximadamente, en estas ando 😉
Category: Entre líneas
A los niños perdidos
Los que, por suerte o por desgracia, salen del sueño prescrito, nacen a este mundo como niños perdidos. ¿Dónde están las palabras, dónde está la casa, dónde están mis ancestros, dónde están mis amores y dónde están mis amigos? No hay, hijo mío. Todo está por construir. Debes construir la lengua que habitarás, debes construir la casa en la que no vivirás solo, y encontrar los ancestros que te hagan más libre. Y debes construir la nueva educación sentimental por la que, de nuevo, amarás.
Si veis los vídeos, seguiréis leyendo. Y nadie os contará las reglas de esa construcción, pero sabréis al menos, de nuevo, que no estáis solos con vuestros ladrillos.
Ya me diréis.
Alberto Porlan, lo útil y lo poético
¿Qué puede hacer la poesía, qué puede hacerse desde la poesía, por un mundo más vivible?
La eterna cuestión, amigos, ésa es la eterna cuestión. Mi opinión es que lo útil y lo poético son tan distintos como los calamares y las ostras. La utilidad de la poesía, si existe, es individual, nunca colectiva. Lo que ocurre es que siempre se ha abusado de ella como vehículo colectivo. La Marsellesa tiene una base poética, y el Cara al Sol también. Me parece que en País hay un verso que dice algo así como… la perfidia del himno envenenó al muchacho. Lo que creo, en definitiva, es que un buen verso, cualquier buen verso, hace al mundo más vivible, como vosotros decís. Pero no recuerdo casos en los que detuviera un fusilamiento, evitase una violación o levantase a un cabronazo de su trono.
Para recordar que de leer, lo importante era leer
Me envían este artículo de José Luis Pardo (sabiendo que pienso a lo que cuenta este señor siempre vale la pena echarle un ojo) y me digo que el último párrafo bien merece un corta-y-pega.
Y no comento, porque para que añadir paja a un “y con esto queda todo dicho”.
Vuelve el óxido
Esa panda de cuentistas os volvemos a dar cita. Esta vez, a los que anden por Madrid. Este viernes, a las ocho, en Tres Rosas Amarillas.
Se rumorea que, después de los protocolos, los presentes igual se vuelven locos y se lían la manta a la cabeza con una jam session de cantar, contar, recitar… según le corresponda a cada uno. Yo lo dejo caer.
“Qué horror, hoy he hecho bien mi trabajo”
Y el amigo Proust me mira incriminador desde la mesilla, repitiendo: Read More
Así amanece a veces un domingo en Núñez de Balboa 114
“Porque no hay nada a lo que más fácilmente se acostumbre una persona que a los milagros, cuando los ha conocido una, dos o tres veces. Sí, la naturaleza del hombre le lleva a enfadarse cuando no obtiene de forma continuada lo que parece haberle prometido un azar casual o pasajero. Así son las personas.”
(Joseph Roth, “La leyenda del santo bebedor”)
Hablar en público
Siempre lo supe pero nunca había localizado las razones: por qué las mujeres que hablan muy bien en público tienen en general más fuerza que los hombres que hablan muy bien en público. Voilà:
Escucha a una mujer hablando en una asamblea (si no ha perdido el aliento dolorosamente): no “habla”, lanza al aire su cuerpo tembloroso, se suelta, vuela, toda ella se convierte en su voz, sostiene vitalmente la “lógica” de su discurso con su propio cuerpo; su carne dice la verdad. Se expone. En realidad, materializa carnalmente lo que piensa, lo expresa con su cuerpo. En cierto modo, inscribe lo que dice, porque no niega a la pulsión su parte indisciplinable, ni a la palabra su parte apasionada. Su discurso, incluso “teórico” o político, nunca es sencillo ni lineal, ni “objetivado” generalizado: la mujer arrastra su historia en la historia.
(“La risa de la medusa”, Hélène Cixous)
Cogiendo carrerilla…
…para todo lo que se avecina. Porque vuelve a empezar la estación de saraos.
En esta vez que estoy a este lado de la despedida
La bruja que me enseñó a hacer maletas se va de viaje. Con ella aprendí a preparar el equipaje de modo en que cupiera todo. Y a prepararlo mojado, y a prepararlo deprisa, y a prepararlo bajo el sol y bajo el viento. Esta vez me ha enseñado, sin embargo, la mayor de las claves, que no me había revelado nunca al explicarme cómo hacer mochilas ligeras: lo único fundamental al preparar el equipaje es que no se quede en casa lo más importante. Read More