Por amor al libro

(Columna publicada en el número 3 -marzo 2013- del periódico La Marea).  

Hay oficios que van a contrapelo de los días. El de editor es uno de ellos: en tiempos de capital y recortes, dar vida a libros no parece la más razonable de las ocupaciones. Y menos aún si se trata de poesía, con tiradas de pocos miles en el mejor de los casos y más voluntad de perdurar que de irrumpir. Pero, frente a la lógica de la rentabilidad, ocurre que un editor de poesía es, ante todo, alguien que se ha enamorado de un libro. Así que, como en todo buen amor, no le mueve la pasión de poseer ni de sacar beneficio: apenas la alegría de saber que lo amado está en el mundo. Read More