Queridos Reyes Magos,
Aquí estamos otra vez, contándonos para decir deseos. Así se hacen las cosas en mi familia, así me enseñaron a que las hiciera yo.
Ahora que sé un poco más de vuestras tierras, sé que no sé si llegaréis, con tantas cosas que pasan en la ruta que os trae. No os preocupéis si de camino preferís quedaros en una plaza árabe que llegar a nuestras casas: ¡cómo no os vamos a entender!