Qué gusto da encontrar escrito lo que uno estaba pensando

Porque, sin duda, la pelea interna a la que mueve el estado de cosas que cuenta es la ocupación que más tiempo se come de mi jornada laboral (y, tal vez debería apuntar, la que tan a menudo me lleva a decir “yo no quiero ser periodista” pero otras tantas veces también “que sí, que sí, es sólo que así no”); y estoy encantada de encontrar, más ordenaditos de lo que yo los tenía, algunos de mis propios argumentos contra la objetividad.

Sí, sí, contra la objetividad. Allá vamos (aunque hacia el final, cuando deja de hablar de eso y empieza a hablar de la requetedichosa muerte de la prensa pierde todo o casi todo el interés):   Read More