Advertencia previa: no me gustan las cosas que son raras por el mero placer de serlo. Casi todo lo que lleva en algún punto de su concepción la palabra performance me pone de los nervios. Me molesta que se mezclen churras con merinas, los desnudos gratuitos y que la imposición de escenografía de aviones a las óperas románticas. Me siento insultada, en general, con las adaptaciones-a-este-siglo de los clásicos. “Tonterías las justas y los experimentos con gaseosa”. Fin de la advertencia. Read More